La inquietud y constante genuinidad de los integrantes de la banda mendocina los llevó a seguir produciendo música más allá de todo contexto pandémico.
Este 2020 no frenó la productividad artística de Mi Amigo Invencible, sino que los encontró unidos para seguir editando sus obras musicales. La banda referente de la escena indie de Mendoza siempre termina por demostrar su perfecta búsqueda hacia nuevos tintes sonoros y así lo hicieron en Nuestro mundo. El EP, publicado en noviembre de este año, está integrado por “Jardín secreto” “Suavemente entusiasmado”, “Algo no ha terminado” y una versión acústica de la primera canción del tracklist. En conjunto, editaron la película Suavemente entusiasmada y allá por el mes de febrero publicaron el single “Freelance”.
Indie Club charló con Pablo di Nardo, quien contó cómo vivieron desde adentro el aislamiento, su unión con el sello discográfico de México y California Devil the Woods, el antes y el después de Dutsiland (2019) para la banda y qué cosas nuevas se vienen para Mi Amigo Invencible.
Pese al contexto de aislamiento social que se vivió durante casi todo el año, Mi Amigo Invencible nunca se detuvo y siguieron editando material, ¿cómo llevaron adelante todos esos meses?
Con Devil The Woods conseguimos ese empujoncito para que no sea un año tan oscuro o tan bajón. Tuvimos una gran motivación por ese lado porque nos apoyaron para hacer Nuestro mundo. Mariano también se apareció con un puñado de canciones muy inspiradas, algunas quedaron afuera y otras fueron a su disco de El Príncipe Idiota (Gigaaaante). Cuando nos mostró “Jardín secreto” estábamos muy entusiasmados para grabarlo, y lo trabajamos con Luke Temple. Todas esas cosas nos fueron manteniendo muy atentos y activos a pesar de que estábamos todos muy locos; tuvimos la suerte de poder hacer un EP y filmar videos.
¿Cómo fue surgiendo cada canción de Nuestro mundo?
Todas surgieron durante la cuarentena. “Jardín secreto” nace después de que Mariano vio una película a la noche, se despertó, hizo la canción y la completó con unos textos de la poeta Flavia Calise. “Suavemente entusiasmado” la terminamos un poco en la sala y en su letra se nota el contexto de cuarentena como con todas las canciones. “Algo no ha terminado”, por supuesto la letra la hizo Mariano (Di Césare), y más allá de que sé algunas cosas internas de la canción, es verla desde afuera y sentir que a todos nos rondaban algunos murciélagos en estos tiempos.
También lanzaron la película Suavemente entusiasmada, ¿de qué surgió la idea de hacer esa producción audiovisual?
En un principio iba a ser algo más breve y más tranquilo, pero Mariano es un incansable que siempre está buscando y haciendo. Se fueron dando manija con el director y lo que en un principio era un pequeño video, terminó siendo una mini peli. Se ve que ambos son del gremio de la manija (risas). Fue muy emocionante y movilizante hacerla porque se filmó en plena pandemia. De golpe empezamos a encontrarnos para trabajar y a romper esa barrera del miedo; hicimos el test y una vez que todos ya teníamos el resultado negativo estábamos con más confianza. El track original que está en Spotify cambió un poco para el video, entonces quedó algo distinto, hay un cambio en la música. Además en el inicio, cuando se muestra el supermercado chino, aparece una versión más electrónica.
¿Era impensado para ustedes poder producir todo esto en este año particular?
Si, pero sobre todo por volver a hacer un show presencial (en Parque Centenario el pasado jueves). Teníamos la idea de que íbamos a poder tocar a futuro, cuando ya estuviera la vacuna, pero no nos imaginábamos que iba a ser en este mismo 2020. Fue una sorpresa muy buena para todos y tuvimos una preparación muy especial que fue el streaming en el ND Ateneo.
¿Cómo fue preparar ese show virtual?
Ensayamos mucho y tuvimos la emoción de juntarnos en la sala para ensayar después de muchos meses de sólo vernos por Zoom. Espero que salga un disco de ese show, porque estuvo buenísimo poder llevar la sala al teatro. Además, trabajamos así tal como se mostró: en ronda, entre la percusión, la batería, el bajo, las guitarras y las teclas. Sentimos que estuvo muy conectado con Dutsiland porque estábamos todos conectados a la vez y haciendo música juntos.
¿Qué significó Dutsiland (2019) para ustedes?
Con Dutsiland cambió mucho la banda, cambiamos nosotros. Ese disco nos transformó. Trabajamos con Luke Temple que vino desde Estados Unidos y nos enseñó mucho porque aprendimos a trabajar la música todos juntos. Es un antes y un después para nosotros, porque toca otros colores musicalmente que Mi Amigo Invencible los había visitado pero con este álbum los visita de otra manera. También vinieron cambios internos en la banda, se fueron algunos músicos, hubo cambios desde muchos lugares. Así que Dutsiland nos transformó, hay un antes y un después.
¿Sentís que las nuevas canciones tienen un complemento en cuanto a lo sonoro?
Si y seguramente las canciones que saquemos el año próximo van a tener una búsqueda nueva, porque eso tiene Mi Amigo Invencible: una necesidad de cambio. Mariano es un especialista en los cambios, los arreglos que suceden son muy particulares. Por ejemplo eso nos pasó con Dutsiland, teníamos todos los arreglos hechos hasta que vino el productor y nos dijo “buenísimo, todo eso que hicieron está bárbaro; pero ahora vamos a hacer otra cosa”. Esas situaciones nos dan una especie de unidad y cercanía.
Se arriesgan al cambio…
Si, hay un riesgo. Pero creo que algo que tiene la banda es no pensar en cómo va a impactar. Se piensa en la música, en que sea genuina, que el arreglo esté bueno y la letra represente. Después está genial si eso le gusta al público y estamos felices de la recepción que tuvo el EP Nuestro mundo y “Freelance”.
¿Qué podes adelantar del 2021 de Mi Amigo Invencible?
Siempre tenemos ganas de hacer un disco. Veníamos charlando con otro productor para este año pero se pospuso. Vamos a ver si cambiamos de plan. Otra idea es sacar un compilado y un disco extendido. Obviamente volver a tocar y poder girar. Esperamos también volver en un futuro a tocar a México, nos gustó mucho la recepción que tuvimos, era un sueño para nosotros.